En la conversación con el periodista David López Frías, Jon Viar —autor de la obra teatral Una herida incurable—relata cómo descubrió la magnitud del abuso institucional. Su decisión de escribir y representar estas vivencias responde a la necesidad de transformar el dolor en lenguaje teatral y hacer que temas tabú salgan al escenario.
A lo largo de la entrevista Viar reflexiona sobre el arte como herramienta de verdad y catharsis. Partiendo de su obra Una herida incurable, que retrata un abuso cometido por un sacerdote, él defiende que la dramaturgia puede servir para reconstruir lo que ha sido silenciado.
Finalmente, Viar afirma que su compromiso artístico es inseparable de su compromiso ético. No busca solo entretener, sino abrir espacios de reflexión sobre la autoridad, el silencio y la responsabilidad. Su testimonio se proyecta en el escenario y en la sala, pero también en la vida diaria de quienes se enfrentan al trauma, la vergüenza o el olvido. Con esta entrevista, se revela como un creador que convierte la contención en voz y rescata la dignidad de los que callaron demasiado tiempo.
Podéis leer la entrevista completa en El Periódico → [Jon Viar: “Creo que Ratzinger se fue por casos como este”].
